El objetivo de las prácticas de navegación y seguridad es, obviamente, formarnos como patrones. Las prácticas obligatorias para la obtención del título son las de Navegación y Seguridad (las prácticas de vela obviamente son solo necesarias para los que deseen navegar en veleros).
El temario de las prácticas intenta cubrir todo lo necesario para poder ser un patrón fiable basándose en varios ejes. El primero, sería conocimiento del barco y su tripulación. Se procede a las comprobaciones anteriores a la salida. Parte meteorológico y su posible evolución durante el día. Se verificará que el material de seguridad esté en orden y sepamos utilizarlo, y que la embarcación está en buena forma tras la inspección de sentina, el motor y la radio. Pasaremos a continuación a hacer hincapié sobre como enseñar la embarcación a la tripulación, señalando los puntos más conflictivos del barco, así como dándoles un pequeño briefing. La comunicación y coordinación de un grupo es un asunto clave para un patrón.
Pasamos luego a todo lo relacionado con la navegación y la travesía que deseamos hacer. Se pondrá en práctica los conocimientos de cálculo de rumbo y planificación de travesía adquiridos en el curso teórico. Se hará especial hincapié en los principios que rigen la maniobra dentro de la marina, con amarres y desamarres por parte de todos los alumnos. Será el momento también de trabajar los nudos y vueltas más importantes para que este trabajo de cabuyería complemente (o no perjudique) las maniobras.
Cuando logramos salir a mar abierto es el momento para las técnicas de posicionamiento, utilizar los equipos electrónicos, corrección de derrota, RIPA, balizamiento…. y por supuesto no nos olvidamos del fondeo.
A lo largo de las 16 horas que duran las prácticas se buscará el momento más propicio para trabajar a conciencia la maniobra de hombre al agua y la de remolque, dos operaciones de gran importancia para la integridad de las personas.
Estos son los parámetros alrededor de los cuales tiene que orbitar las prácticas de navegación y seguridad siempre adaptándose a las condiciones y circunstancias del grupo y de la meteorología. Será siempre difícil conseguir que las habilidades de los alumnos cambien radicalmente tras solo 16 horas de práctica, pero con método por parte del instructor y predisposición por parte del alumno se conseguirá que estos entiendan los principios de la navegación. A partir de ese punto, solo se necesita práctica y más práctica.
Dani Cavanilles
Chief Instructor